Hay tantas veces que vamos tan, tan rápido, que ni siquiera paramos a procesar lo que nos ocurre. No nos damos tiempo a ver cómo se colocan las piezas y pasamos de largo, sin tomar consciencia de qué es lo que se ha movido en nosotros. Quizás pretendiendo que no nos afecte si pasamos de puntillas o que no se haya movido nada.
He aprendido que, para mi, parar y ver qué piezas se han movido dentro de mi y dar el espacio suficiente, me hace vivir de una manera más sabia, más en paz conmigo y con mi alrededor.
En esta época de inmediatez necesitamos parar, re-conectar con nosotr@s y entendernos.
Hay situaciones que realmente nos pueden llevar casi al límite de nuestras fuerzas, que nos resulten muy complicadas, difíciles y no sepamos ni cómo hacer, gestionar o qué hacer con ese "remolino" que se está formando dentro de nosotros mismos. Está claro que no son situaciones que nos gusten y no queremos que pasen, sin embargo están ahí y estamos ahí.
Aprender a ESTAR con lo que hay es lo que nos puede ayudar a salir de ese remolino en el que nos vemos envueltos. Y aprender a estar, no significa no hacer nada por cambiarlo, de hecho, es justo al revés. Aquí te pongo los cuatro pasos que puedes hacer para las situaciones complicadas:
* Lo primero es reconocer y aceptar dónde estás, el punto en el que te encuentras, sin meterte más en el barro, la situación tal cual es, sin juzgarte ni juzgar.
* Lo segundo es estar de tu parte, como lo estarías con tu mejor amig@ en esa situación, no machacarte. Poder entenderte, notar cómo te sientes.
* Lo tercero, entender que tú no eres esa situación, estás en esa situación, sea la que sea, pero eres más que eso. La vida es como un río y hay veces que te toca estar en aguas tranquilas y transparentes y otras veces que pasas por aguas turbulentas...
* El cuarto paso es preguntarte "¿qué necesito ahora mismo?, ¿me lo puedo dar yo?" quizás sea un mensaje de ánimo, salir a pasear, o llamar a un/a amig@, persona de confianza... Es importante que percibas tus necesidades e intentes satisfacerlas.
Con la mente, el cuerpo y las ideas más calmadas, podrás tomar una visión diferente de lo que está pasando y actuar de una manera más sabia, sin responder de manera automática.
La vida es un constante cambio y nos tocará estar en muchas situaciones agradables y otras no tanto, pero no te olvides de ti, tente en cuenta. ;-)
Según varias encuestas, más de la la mitad de las personas que trabajan, no están comprometidas con su empresa. Un dato relevante que viene a decirnos que hay algo que no estamos haciendo. Hay algo que las empresas pueden estar descuidando.
Como equipo de #FelizyRentable, buscamos que las personas nos sorprendan, y aporten en el lugar en el que están, en la situación que sea. Que puedan sentir su trabajo como una forma de realizarse también personalmente.
¿Ya sabemos qué quiere aportar cada persona? ¿Cuáles son sus valores? ¿Coinciden con los de la empresa?
El reto actual: Implicar a los equipos
Descárgate la guía Feliz y Rentable (pinchando en la imagen)
La guía te ayudará a ser más feliz en la vida y en el trabajo: - Descubrirás qué te hace sentir bien (tus valores) - Ponerlos en práctica en la vida y en el trabajo
Tendrás una lista de valores que te ayudarán a poner nombre a lo que sientes, sabrás si eres fuego, tierra, agua o aire, descubrirás lo que es importante en tu empresa y lo que tú puedes hacer por tu empresa siendo más feliz.
Dar lo máximo en tu trabajo no
exige esfuerzo, si no es así, quizás estés pasando por alto varias cosas
importantes. Me explico un poco más.
Puede que esta sociedad tan
dedicada al constante esfuerzo, ir detrás de la zanahoria colgando del palo al
que nunca llegas, objetivos cada vez más exigentes, más agotadores, más asfixiantes…
se esté olvidando de algo muy importante: si las personas no nos sentimos
valoradas y respetadas, difícilmente daremos lo mejor nuestro.
¿De dónde sacarás las fuerzas
para seguir? ¿Dónde está tu motivación interna, esa que te ayuda a coger
aliento cuando te falta? ¿Qué es lo que te levanta de la cama para seguir
avanzando?
Hay tantas contestaciones como
personas. Y es que esas contestaciones tienen que ver con nuestros valores
personales, los propios, nuestro ADN intangible.
“Una vida plena es una vida que
valoras.” Karen & Henry Kimsey-House (fundadores CTI - The Coaches Training
Institute)
Si valoro el compartir, ¿hay
suficiente generosidad en mi trabajo, entorno, vida?, Si valoro asumir riesgos,
¿hay suficiente aventura en mi trabajo, en mi vida? Si valoro abrir la mente,
¿hay suficientes experiencias nuevas en mi vida, trabajo, relaciones?
Si las personas no nos sentimos
valoradas en nuestro trabajo – y por valoradas me refiero a respetar nuestros
valores, ya que es parte de quienes somos - ¿cómo vamos a “poner toda la carne
en el asador” para llegar a los objetivos? Pues difícilmente.
En los lugares, trabajos,
empresas, familia, o con las personas con las que nos sentimos que se están
respetando nuestros valores, todo fluye fácilmente, no hay esfuerzo, que sí hay
acción, constancia y perseverancia. Fluye como ponerse todas las personas a
remar en la misma dirección.
Si quieres poner nombre a tus valores, descárgate la guía Feliz y Rentable.
Si quieres saber cuáles son tus valores personales y ver si estás pasando por encima de ellos en tu trabajo, es una muy buena manera de empezar con esta guía.
Si tu equipo o tu organización está interesada en ser más #FelizyRentable puedes ponerte en contacto con David Díaz Robisco o conmigo misma y podremos exponerte cómo llegar a ser más #FelizYRentable. ;-)