Tomar consciencia nos permite tomar el mando de nuestra
vida.
Primero de todo explicaré lo que es la conciencia y la
consciencia, al menos en términos generales o para mí, ya que en diferentes
campos hay diferentes denominaciones, por ejemplo en la psicología budista
utilizan la conciencia en lugar de la consciencia.
La conciencia se refiere a la moral (entendiendo como la capacidad de distinguir entre "lo bueno y lo malo") o bien a la recepción normal de los estímulos del interior y del exterior. Otra cosa es ser consciente de ello, en cuyo caso lo llamamos consciencia.
Un
ejemplo muy simple: voy caminando por la calle con prisa y mil cosas en la
cabeza, y de repente, meto el pie en un charco que me cala el zapato ¡enterito!
Si me doy cuenta de ello, pondré mi atención en ese instante
y seré consciente (manteniendo la calma), entonces podré ver las opciones que puedo hacer (es como que
las demás cosas que tenía en la cabeza, se apartasen un momento para pensar en
ese preciso momento).
En cambio si no soy consciente de ello, llevo tanta prisa y con
tantas cosas en la cabeza que ni me entero de lo que me ha pasado, entonces,
será como que “no existe para mí”.
En la primera situación del ejemplo, soy consciente cuando
percibo el agua en el pie, cómo lo noto –si está fría o caliente-, noto la
sensación que me deja –si es desagradable o, igual tenía tanto calor que me ha
refrescado…- y simplemente lo observo y
percibo (sin juicios), luego ya veré que puedo hacer.
La segunda situación es como “ir con el piloto automático”,
no somos conscientes de lo que nos pasa o hacemos, muchas veces es la parte de
acción-reacción sin parar a pensar, cuando empezamos a gritar o jurar y nos quedamos ahí un rato.
Hay muchas cosas que hacemos con el piloto automático, desde
la inconsciencia -y que son necesarias ya que seguramente sino, nuestra cabeza
tendría el tamaño de un camión!!-, como andar,
pestañear, respirar -que únicamente nos damos cuenta –somos conscientes- si
dejamos de hacerlo, prueba a estar 1 minuto sin respirar ;-)
cronometra y verás… toda tu atención ahora está en “aguantar la
respiración”-.
Aun así, hay acciones que podemos hacer conscientemente,
como andar o comer y que desde la consciencia nos va a dar mucha información
sobre nosotr@s mism@s... simplemente prueba ;-)
Nuestra cabeza ha cogido el hábito de tener mil pensamientos
a la vez. Cuando empezamos a ser conscientes, podemos identificar esos
pensamientos. Seguro que hay muchos innecesarios, o negativos que nos van
quitando claridad.
Simplemente con el solo hecho de empezar a ser conscientes
de ese tipo de pensamientos y “clasificarlos” ya nos permite volver a tomar más
el mando de nuestra vida.
La consciencia es el arte del “d-arte cuenta de”
Te animo a que pruebes durante esta semana a ser más consciente y que notes los cambios que esto produce.
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